domingo, 11 de octubre de 2009

Desde el otro lado del océano.
No es fácil, ni sencillo cuando estás tan lejos. No es fácil tener que esperar años para verte.
Tengo suerte de que me hagas sonreír cuando sonreís, incluso de que me hagas llorar cuando llorás. Sos mi sueño al soñar, mi meta a alcanzar. Sos esa persona con la que compartiría todo. Sos esa persona con la que tengo miles de cosas en común. Sos el único al lado de quien me siento pequeña en la medida justa. El único que quiero tomar de la mano frente a todos.
Hay gente que es incapaz de encontrar una persona que le provoque tantas cosas.
No tienen quien los haga brillar, quien les de felicidad. Son como planetas muy lejos del sistema solar.
Yo soy afortunada de sentir esto. Pero mi miedo es ya no volver a sentirlo nunca más.
Sos tan especial, que empiezo a dudar de encontrar alguien que se asemeje. Sos tan increíble y original, que estoy creyendo que tal vez seas único. Soy tan retorcida y obstinada, que a lo mejor ya nunca encuentre a alguien que me satisfaga enteramente.
Necesitarte tanto es como tener la mitad del corazón al otro lado del océano. Y estar dispuesta a cruzarlo a nado, pero sabiendo que eso no es suficiente para encontrarlo. Porque te regalé mi corazón el día que vos me regalaste la primer sonrisa. Para mí, fue un gran negocio ya que tu sonrisa lo vale todo. Pero ahora mi corazón te pertenece, y, como dicen por ahí, ‘lo que se regala no se devuelve’.
No quiero pedírtelo, sé que está donde corresponde. Sólo quiero estar cerca de ti. Atravesar todas esas cosas que nos separan y poder tocar tu piel, oler tu ropa, ver cómo el viento revolotea tu pelo.
Quiero que estemos bajo el mismo cielo, no estar del otro lado del mundo. Porque mientras yo vivo, vos estás durmiendo. Y mientras vos estás bajo el sol, yo sólo tengo oscuridad.
Entonces, ¿cuándo será el día en que pueda mostrarte que en esta tierra todo es par? Quiero pensar que si yo te extraño, vos me necesitás en algún lugar. Y si yo me siento un poco vacía, vos tenés con qué llenarme por completo.
Somos parte del mismo rompecabezas, todo encaja. Pero estamos tan lejos ahora, tan desarmados.
A ver cuándo la vida se da cuenta y nos une otra vez…

No hay comentarios:

Publicar un comentario